¡RACING CORAZON!

A Poco más de cinco meses del último triunfo el equipo de Miguel Angel Russo lo hizo de nuevo. Le gano como visitante a Boca por 2 a 1 con goles de Claudio Yacob y Marcos Caceres, abrió el marcados Lucas Viatri a los 9 del primer tiempo


Lejos estuvo de ser una gran producción, la del equipo de Miguel Ángel Russo, porque al principio estuvo perdido, pero que cuando se acomodó, ya nunca volvió a desequilibrarse, especialmente por el trabajo realizado por su última línea, en la cual se destacaron el Paraguayo Cáceres, el autor del gol de la victoria, y un ex Boca Matías Cahais.
A Boca ya se le escaparon cinco de los seis primeros puntos del torneo. Sin embargo lo peor es que no se advierten en su rendimiento ni el sostén colectivo ni respuestas individuales capaces de encaminarlo. Así fue que se retiró derrotado al cabo de noventa minutos en los que ilusionó al comenzar, para terminar decepcionando.


Boca fue el dueño de la pelota al principio. La hizo circular con precisión, obligó a Racing a correr detrás de ella, se afirmó en la seguridad de Sebastián Battaglia y Gary Medel, con Jesús Méndez y Clemente Rodríguez muy activos por los costados, y Damián Escudero moviéndose con criterio.
Tardó unos minutos en pasar de las insinuaciones a las concreciones. Sobre los 9, Méndez cruzó una pelota desde la derecha a la que no llegó Martín Palermo, por el sector opuesto la recogió Clemente, y la colocó en la cabeza de Lucas Viatri, para que el clásico se pusiera 1-0.
Pasados los 20 minutos, Racing empezó a cubrir mejor los espacios y a compartir la posesión de la pelota, produciendo su primera aproximación a los 27, con un remate de Matías Cahais que Cristian Lucchetti rechazó con dificultad. A los 33, Patricio Toranzo ejecutó un tiro libre desde la derecha, tocó por el camino Claudio Bieler, la pelota cruzó el área y Claudio Yacob en posición adelantada, difícil de advertir en un primer momento, la empujó al gol.
El último tramo del primer tiempo fue confuso, pero Boca ya nunca volvió a jugar con comodidad, y por el contrario era Racing el que dejaba la sensación de haber llevado el partido hacia el terreno que le convenía.

El segundo tiempo de Boca fue inexcusable. Ni jugó ni tuvo vigor suficiente como para torcer el rumbo.
Inseguro en defensa, sin armado, ni mucho menos llegada, con jugadores ausentes, como por ejemplo Martín Palermo, a quien sólo su historia, le permitió completar los noventa minutos.
Aprovechó un falla
Habían transcurrido tan sólo cuatro minutos, cuando Rodríguez falló de manera incompresible y dejo la pelota servida para que Cáceres, en un vértice del área, a la carrera y de zurda, la clavara en el ángulo superior izquierdo.



Desde entonces el partido pareció tener dueño definido, porque Racing lo controló con tranquilidad, ante un rival impotente, al que los cambios no le dieron ningún reedito.
Sólo dos acciones pueden mencionarse como atisbo de llegadas por parte de Boca: un cabezazo alto de Caruzzo y otro forzado de Palermo, que controló Fernández.
En definitiva, para Racing esta fue una victoria auspiciosa que lo coloca como candidato natural a sostenerse en el pelotón de punta. Para Boca la de hoy fue una derrota que lo obliga a un urgente replanteo, porque de este modo las cosas no funcionarán.

En la proxima fecha la Academia enfrenta como local a San Lorenzo y Boca visita en Floresa a All Boys.