Newell´s sumó una nueva sonrisa en está semana perfecta. Empató 1-1 con Estudiantes y consiguió el pase a octavos de final de la Copa Sudamericana. Lo espera la altura de San José, de Oruro.
En Rosario, la primavera llegó con todo. Después de ganarle a River el domingo, la Lepra llegaba al estadio de Quilmes con la idea de cuidar el resultado obtenido la semana pasada en Rosario. Sabía que enfrente tenía un rival que tiene mística y sabe como dar vueltas resultados.
La noche comenzó siendo ideal para el equipo platense. A sólo doce minutos del arranque, abría el marcador con un gol de pelota parada. Fórmula exitosa si las hay: centro de Verón que peinó Desábato y empujó Federico Fernández, el defensor juvenil que ayer jugó como volante.
La Bruja se hacía dueño y señor de la mitad de la cancha. Pero al igual que en el partido de ida, un error defensivo abriría el camino al equipo rosarino. Cuando faltaban tres minutos para el final de la primera etapa, Desábato perdió la pelota por el lado derecho de la defensa. Broghelo aprovechó el error y definió ante la salida de Orión. El gol le dio aire al equipo de Sensini e impotencia al de Sabella, una vez más por un traspié propio, el rival llegabal empate.
En el segundo tiempo, jugó más la actitud que el juego. El equipo local se hundió en el cansancio (el calendario hizo que jugará siete partidos en veinte días) y la impotencia de no lograr lo que en épocas no muy lejanas, se conseguía. En la visita, con Schiavi y Alayes cerrando la defensa y Formica tratando de aprovechar cada contraataque, aguantó y sumó una sonrisa más en esta semana primaveral.
En Rosario, la primavera llegó con todo. Después de ganarle a River el domingo, la Lepra llegaba al estadio de Quilmes con la idea de cuidar el resultado obtenido la semana pasada en Rosario. Sabía que enfrente tenía un rival que tiene mística y sabe como dar vueltas resultados.
La noche comenzó siendo ideal para el equipo platense. A sólo doce minutos del arranque, abría el marcador con un gol de pelota parada. Fórmula exitosa si las hay: centro de Verón que peinó Desábato y empujó Federico Fernández, el defensor juvenil que ayer jugó como volante.
La Bruja se hacía dueño y señor de la mitad de la cancha. Pero al igual que en el partido de ida, un error defensivo abriría el camino al equipo rosarino. Cuando faltaban tres minutos para el final de la primera etapa, Desábato perdió la pelota por el lado derecho de la defensa. Broghelo aprovechó el error y definió ante la salida de Orión. El gol le dio aire al equipo de Sensini e impotencia al de Sabella, una vez más por un traspié propio, el rival llegabal empate.
En el segundo tiempo, jugó más la actitud que el juego. El equipo local se hundió en el cansancio (el calendario hizo que jugará siete partidos en veinte días) y la impotencia de no lograr lo que en épocas no muy lejanas, se conseguía. En la visita, con Schiavi y Alayes cerrando la defensa y Formica tratando de aprovechar cada contraataque, aguantó y sumó una sonrisa más en esta semana primaveral.
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